BENITO A. DE LA MORENA

ENTREVISTA CON EL DR. BENITO A. DE LA MORENA
TRAS SU CONFERENCIA 
“UN PASEO POR EL CIELO. UN SEGUNDO EN LA VIDA DEL UNIVERSO”

Por Manuel Garrido Palacios

El nombre de su conferencia trae a la memoria un verso del gran poeta José Manuel de Lara, que habla de “la efímera eternidad de un instante”, y de lo que dice Steven Weinberg en “Los tres primeros minutos del Universo”. Como si el coloquio posterior continuara, me dirijo al Dr. de la Morena, un lujo de científico y de persona, levanto mi mano y hago las preguntas que no hice en el auditorio:
─MGP: Hay una profundidad en el verso, pura percepción del paso del tiempo, y una posible medida del inicio de todo: un instante, tres minutos. Su paseo por el cielo quiere describir un segundo de la vida del Universo. Cada voz da su visión. ¿Son tres caminos que buscan lo mismo?
─B de la M:  Si definimos la poesía como la parte etérea del pensamiento, esa  imaginación que describe lo que aparece en la mente del poeta, entonces me atrevería a decir que la visión de “un segundo en la vida del Universo” es un canto al romanticismo, a lo imposible, una loa al corazón y una sinrazón que le pide a la mente actuar en esa sintonía universal que nos recuerda lo sublime de la “creación”.
─MGP: ¿Qué sabemos de un Universo cuya medida desconocemos?
─B de la M:   Si pretendemos asociar el concepto Humanidad a un aspecto no─físico del ser humano, que es esencial e intrínseco de nuestra especie, dudo que ese vocablo que nos asimila con la naturaleza del género humano, sea una percepción correcta. En mi conferencia he querido resaltar nuestras imperfecciones comparándolas con  lo poco que sabemos de un Universo cuya medida desconocemos, como su origen y el motivo de su creación.
─MGP: Este vacío de medida, origen y motivo parece emparentar con el misterio del sentido de la vida y de la idea de que nos rige algo que tampoco controlamos.
─B de la M:  Dejarlo a la casualidad me parece muy atrevido, hablar de un Ser Superior me acongoja, pero lo acepto desde mi sinrazón. Mi mente no ha llegado a evolucionar tanto como para entenderlo, pero deseo saber y me esfuerzo en ello. Tampoco entiendo los genocidios, el proselitismo, el maltrato de género, la insolidaridad, el exceso de ambición, el comercio de armas, el hambre, las guerras y un largo etcétera con el que parece sintonizar el ser “humano”. Será que mi mente es joven aunque mi cuerpo envejezca.

© B. de la M. · © M.G.P.