Voces y guitarras de Alosno
El alma soñadora de esta tierra huelvana,
vibrando en la armonía de un arpegio sencillo,
vertía en el ambiente la exquisitez galana
de esa canción del pueblo llamada fandanguillo.
No era la melodía propia del cante hondo
-calderones dolientes y amargo balbuceo-,
sino la trova recta que iba del alma al fondo,
voz surgida en las fuentes donde nace el poleo...
Fandanguillo de Huelva, ¡qué impresión me causaste
cuando al fin de tu verso campesino y valiente,
bañado en deliciosa nostalgia suspiraste,
conmoviendo mis fibras y nublando mi frente!
¡Fandanguillo que sueña con la dicha futura
y evoca los amores que el tiempo se llevara!
¡Fandanguillo serrano, que nació en la espesura,
entre el oculto arroyo y el lentisco y la jara!.
© Miguel Benitez de Castro
© Foto MGP